Resumen de la Perashá: Luego de la revelación en el Monte Sinaí descrita en P. Yitró, la Perashá anterior, en esta sección se detallan muchas leyes dictadas al Pueblo de Israel subsiguientes a la entrega de la Torá, sobre todo estatutos de orden civil. Mishpatim empieza dilucidando las regulaciones del Sirviente Hebreo, de como debe ser liberado después de 6 años de servicio, y el procedimiento que se debía realizar cuando éste expresaba su deseo de permanecer al servicio de su patrón. La Torá continúa con las leyes de la Sirvienta Hebrea y los términos de su emancipación. Otras leyes incluidas en esta sección son las obligaciones del marido hacia su esposa; las penas y castigos por el asesinato; por el homicidio involuntario; por secuestro, asalto y robo; así como por maldecir a los propios padres, y por dañar a otras personas en sus cuerpos. También encontramos el castigo para aquél que mata o lastima físicamente a su esclavo, así como para aquel que, al pelear con otro individuo, golpea accidentalmente a una mujer preñada, causándole un aborto.

Después, la Torá se enfoca en las responsabilidades del individuo cuando sus pertenencias causan daños a terceros en sus personas o posesiones. Ejemplos de estos daños son: cuando un animal cornea a persona o animal, cuando la persona deja un obstáculo (por ejemplo, un hoyo) en la vía pública, o cuando enciende un fuego en su propiedad y éste se sale de control causando daños a terceros. Igualmente, a fin de corregir el daño causado, una persona que roba está obligada a restituir el capital robado más, en algunas ocasiones, pagar multas por su acto. La sección concluye con el derecho a combatir, e incluso matar en defensa propia, a un delincuente, según la situación lo exija.
A continuación, la Torá detalla las responsabilidades de los “Cuatro Tipos de Guardianes”, es decir las obligaciones de individuos que toman a su cargo cuidar objetos pertenecientes a otros, lo cual incluye a alguien que toma rentado o prestado un objeto. Otras leyes adicionales vienen incluidas en esta sección: el castigo por seducir a una joven soltera; las prohibiciones de realizar hechicería, bestialismo, sacrificios idólatras; lo grave de maltratar a un extranjero, viuda o huérfano; así como las leyes sobre préstamos que comprenden la mitzvá de prestar dinero al necesitado y la prohibición de la usura, es decir de cobrar intereses por dicho préstamo.

La siguiente sección nos introduce a muchos nuevos preceptos bíblicos: la advertencia contra maldecir a un juez o a un líder del Pueblo; las restricciones respecto de consumir carne de un animal no degollado ritualmente; la prohibición de ofrendar un animal antes de los 8 días de nacido; de cometer perjurio; y la condena a la corrupción judicial. Después, la Torá enseña a separar y entregar las contribuciones agrícolas en su orden correcto; a santificar al primogénito; a regresar un animal perdido a su dueño; y a ayudar a aligerar un animal sobrecargado, aunque pertenezca a un enemigo. Estamos también comandados a no mentir, así como o a no dar ni recibir cohecho (soborno). Aquí se detalla el precepto de dejar descansar la Tierra sin cultivarla durante la Shemitá (Año Sabático). Similarmente, cada semana, se trabajan seis días y el Séptimo (Shabbat), tanto nosotros, como nuestros sirvientes y ganado, debemos cesar de trabajar y/o realizar melajá (labores creativas). Adicionalmente, se nos prohíbe nombrar ídolos e idolatrías; y se nos conmina a cumplir con las Tres
Festividades de Peregrinaje a Jerusalem –Pesaj, Shavuot y Sucot-, cada una en su respectiva estación. Finalmente, esta sección de leyes nos prohíbe cocinar carne en leche (de su madre). En total, P. Mishpatím contiene 53 preceptos –23 positivos (los cuales ordenan la realización de una acción específica) y 30 negativos (los cuales restringen algo concreto).

Dios promete conducir al Pueblo de Israel a la Tierra de Canaan, y les advierte que no tolerará la desobediencia, pero, que por otro lado recibirán grandes recompensas -las que aquí Detalla para ellos- si erradican las costumbres paganas e idólatras de los Canaanitas.

La parte final de la Perashá nos habla sobre las preparaciones que los Hijos de Israel hicieron los días previos a recibir la Torá: a) Moshé sube a la montaña y recibe un mensaje para el Pueblo. b) El Pueblo se compromete con gran entusiasmo y fe a seguir todas las Leyes proclamando “Todo lo que Di-s nos Mande, Haremos y Entenderemos”. c)Moshé transcribe el “Libro del Pacto” y lo lee a la Nación. d) En conjunto con los primogénitos Israelitas, Moshé ofrece sacrificios a Dios y rocía su sangre sobre el Pueblo, llevándolos a un pacto con El Señor. Después de haber comunicado al Pueblo las Aseret Hadibrot (Diez Declaraciones) por Voz Divina, Moshé es convocado a subir al Monte Sinaí. Así, encarga a Aarón y a su sobrino Jur, hijo de Miriam, dirigir el campamento Israelita durante su ausencia de 40 días y 40 noches, mientras recibe de Dios las explicaciones e interpretaciones de TODA la Torá y, al final las Dos Tablas de la Ley.

CODA: Encontramos lo que parece ser una incongruencia en el texto bíblico: dos muy diferentes relatos, incluso discordantes versiones, sobre el mismo episodio de la entrega de la Torá; por un lado, en la Perashá pasada –Yitró-, una versión de Matán Torá permeada por el miedo, los truenos y un Dios amenazante y, por el otro lado, en esta Perashá otra versión fundada sobre la fe y el amor del nuevo pacto. Nuestro asombro crece cuando ambas versiones son inexplicablemente separadas por una mezcla de medio centenar de importantes leyes civiles, criminales y comerciales, preceptos religiosos, así como por procedimientos judiciales. Del análisis de esta discrepancia entre las dos versiones surgen importantes conclusiones sobre la naturaleza del pacto que la Torá establece entre Dios y el Hombre.

BS”D

PARSHAT TERUMÁ

Resumen de la Perashá: Terumá describe la construcción de una gran parte del Mishkán